El reciente anuncio del gobierno de Javier Milei, que desregula el transporte de pasajeros de larga distancia mediante la Resolución 57/2024, ha desatado una fuerte reacción de la Confederación Argentina de Trabajadores del Transporte (CATT). Los gremios, liderados por Juan Carlos Schmid, advierten sobre los peligros que esta medida conlleva para la seguridad tanto de pasajeros como de trabajadores, en un contexto de creciente inseguridad vial y servicios irregulares.
Para la CATT, la falta de control adecuado podría dar lugar a la proliferación de operadores informales que no cumplen con las normas de seguridad, lo que podría agravar la tasa de accidentes y desordenar aún más un sector ya afectado por la competencia desleal.
Desde el sector del transporte, se considera que las medidas impulsadas por la administración de Milei carecen de la planificación necesaria para evitar que esta desregulación derive en un mercado caótico, que podría perjudicar tanto a los usuarios como a los trabajadores. Los gremios reclaman la implementación de un sistema robusto de controles, sanciones severas contra los servicios no autorizados y mayores inversiones en infraestructura, todo ello enfocado en mejorar la seguridad y la calidad del servicio.
A su vez, la CATT hace hincapié en la problemática que enfrentan los trabajadores de taxis, quienes han visto cómo servicios irregulares, sin ningún tipo de control, ocupan espacios en el mercado. Esto no solo afecta sus condiciones laborales, sino que también representa un riesgo para la seguridad de los pasajeros que, al carecer de garantías de calidad y cumplimiento normativo, se exponen a situaciones de riesgo.
